Hace un año se publicaban los primeros resultados del Proyecto LIFE HEATLAND.
El asfalto frío implantado en 6 calles de la ciudad de Murcia ha conseguido una reducción desde 7ºC hasta de 12ºC en la temperatura superficial respecto a las calles con asfalto tradicional. Esta reducción consigue que la temperatura ambiente disminuya hasta 2ºC.
Gracias a la monitorización de varios parámetros en los 24.000 m2 asfaltados en el barrio del Infante en Murcia, obtenemos también resultados de reducción de 3 decibelios del ruido del tráfico, así como de aumento de la reflectancia en las calles con pavimento frío.
Todas estas características hacen que el proyecto haya sido todo un éxito. Se ha conseguido mejorar la calidad de vida gracias a la reducción de impacto acústico y el aumento de la sensación de seguridad. Además, el aumento de la reflectancia aumenta la sensación de seguridad de los vecinos por la noche y se traduce en ahorro del alumbrado público.
El objetivo de los asfaltos fríos es reducir el efecto isla de calor en las ciudades y conseguir así mitigar los efectos del cambio climático a la vez que la disminución del consumo energético.